
23 May Juan Jesús de la Rosa, José Antonio Moreno Tamurejo, Vicente García Villanueva y Ester Díaz Rodríguez ,Cáceres
Tras la publicación del estudio de Juan Jesús de la Rosa, José Antonio Moreno Tamurejo, Vicente García Villanueva y Ester Díaz Rodríguez (enlace a De la Rosa et al). en el que ponen en conocimiento la presencia de Lamprohiza paulinoi, Nyctophila reichii y, especialmente, Phosphaenopterus metzneri en el Parque Natural del Tajo Internacional, los que formamos “¿Has visto una luciérnaga?” estamos deseosos de visitar el norte de la provincia de Cáceres, en donde el río Tajo y sus afluentes marcan el límite entre España y Portugal.
Deseos cocidos a fuego lento, porque éstas cosas hay que prepararlas con tiempo y la debida atención para no caer en la improvisación y olvidar solicitar los permisos necesarios. En nuestro caso, nos dirigimos a los organismos responsables de las localidades que preveíamos visitar, las cuales nos concedieron las autorizaciones correspondientes: la Dirección General de Medio Ambiente de la Consejería de Agricultura, Desarrollo Rural, Medio Ambiente y Minas de Extremadura, la Direción General del Medio Natural de la Conselleria d´Infraestructures, Territori i Médi Ambient de la Comunidad Valenciana y la Dirección General de Gestión del Medio Natural de la Consejería de Medio Ambiente de Andalucía.
(los resultados de estos días dedicados a las luciérnagas han sido publicados en Methods and recommendations for surveying firefly glow-worms (Coleoptera: Lampyridae): a practical example from Southern Spain, Lampyrid Journal, 3: 49-95 http://www.firefliesandglow-worms.co.uk/lampyrid-journal/vol3/).
Esta pequeña luciérnaga de nombre tan largo, Phosphaenopterus, es una especie muy rara que fue descrita en 1884, pero que no se redescubrió hasta muy recientemente (2003) en Portugal en la Sierra de São Mamede (Portugal). Como ocurre con muchísimos otros insectos, su biografía e historia natural se reduce a estos breves apuntes. Aparte del desafío que supone todo conocimiento, Raphaël tenía recopiladas un buen número de preguntas para este coleóptero, habida cuenta de su similitud con Phosphaenus hemipterus: ¿será diurno?, ¿se comunicará a través de feromonas?, ¿sus alas, aparentemente mayores que las de Phosphaenus, le permitirán volar?, o, casi como un trabalenguas: ¿y si Phosphaenopterus se limitara a ser una forma de Phosphaenus con las alitas un poco más grande? Ramón, que continúa aprendiendo, se quedó un poco preocupado pensando que dónde se había metido al interesarse por las luciérnagas.
Foto: Este es el macho de Phosphaenus hemipterus. Conocemos su presencia en España por unas fotografías que subió Luis Miguel Bugallo a Biodiversidad Virtual. Apreciese el tamaño reducido de las alas. 12/6/2010, Oroso, A Coruña. Fotografía: Luis Miguel Bugallo. http://www.biodiversidadvirtual.org/insectarium/Phosphaenus+hemipterus-img133171.html
Con el asesoramiento de Juan José de la Rosa y de Vicente García Villanueva, Raphaël y Ramón seleccionaron un área que parece prometedora. Tras pasar Valencia de Alcántara, la carretera local continúa avanzando por la llanura, siempre entre dehesas. Para llegar al río, que corre encajonado en la penillanura, se desciende entre berrocales de granito en donde crecen encinas y acebuches.
Foto: Paisaje de berrocal en Valencia de Alcántara, bajando hacia el río Sever. 23/5/2012, Valencia de Alcántara, Cáceres. Fotografía: José Ramón Guzán Álvarez.
Las tierras de aluvión que ha dejado el cauce (antiguas veguitas de cultivo junto a edificaciones desvencijadas) están cubiertas de hierba alta que supera las rodillas. Chopos, mimbres, alisos y fresnos pueblan la ribera, y en las márgenes zarzas, escaramujos, clemátides y otras muchas especies conforman un territorio que presumimos jardín del edén para nuestras luciérnagas.
Foto: Entorno del río Sever, paraíso de las luciérnagas. 24/5/2012, Valencia de Alcántara, Cáceres. Fotografía: Raphaël De Cock.
Tras hacer una primera batida, colocamos las trampas luminosas. Pronto, antes de que llegue a oscurecer del todo, comienzan a acumularse machos de la pequeña luciérnaga Lamprohiza paulinoi. ¡Acertamos con la fecha y el lugar, y el señuelo luminoso se está portando de maravilla!
Foto: Macho de luciérnaga Lamprohiza paulinoi. 25/5/2012, Valencia de Alcántara, Cáceres. Fotografía: Raphaël De Cock.
Hasta después de la una, la noche fue frenética, recorriendo una y otra vez los puntos de muestreo. De tanto en tanto, sorprendíamos a otras inquilinas del lugar: larvas de Lampyris, de Nyctophila reichii y alguna que otra hembra Lamprohiza cuyos encantos luminosos habían pasado desapercibidos a los escuadrones de machos (ciertamente, el balance de individuos machos contabilizados en las trampas de luz y de hembras localizadas en los paseos resultó ser muy desequilibrado: más de 100 romeos frente a 3 julietas).
Foto: Hembra de luciérnaga Lamprohiza paulinoi. 25/5/2012, Valencia de Alcántara, Cáceres. Fotografía: Raphaël De Cock.
Foto: Estos son los encantos de las hembras de luciérnaga Lamprohiza paulinoi. 24/5/2012, Valencia de Alcántara, Cáceres. Fotografía: Raphaël De Cock.
La población de Lampyris (en el campo no es posible determinar la especie a partir de las larvas) nos pareció muy numerosa. Las larvas brillaban con pulsos de varios segundos (en general unos 7 segundos) desde las 22:30 hasta el amanecer, con un máximo de actividad alrededor de medianoche
El premio gordo de la noche nos fue regalado por un par de pupas de Phosphaenopterus, que brillaban con luz fija, y una larva lustrosa que se paseaba iluminada en uno de sus últimos recorridos como juvenil antes de zambullirse en esa etapa intermedia de momia que le convierte en luciérnaga adulta. Y, como sospechaba Raphaël, la larva y la pupa son notablemente idénticas a las de Phosphaenus.
Foto: Pupa de Phosphaenopterus metzneri. 25/5/2012, Valencia de Alcántara, Cáceres. Fotografía: Raphaël De Cock.
Foto: Larva de luciérnaga Phosphaenopterus metzneri. Recuerda a las larvas de otros lampíridos pero tiene un brillo lustroso muy característico. 25/5/2012, Valencia de Alcántara, Cáceres. Fotografía: Raphaël De Cock.
Al día siguiente las pesquisas continuaron rebuscando debajo de piedras, hojas muertas, tierra…. Raphaël localizó algunas pupas adicionales de Phosphaenopterus. Y la sopresa definitiva la aportó una de las pupas, cuya prisa en hacerse adulta coincidió con nuestras ganas de averiguar en qué se convertía, emergiendo ante nuestros ojos un delicado macho de Phosphaenopterus metzneri.
Foto: La luciérnaga Phosphaenopterus metzneri una vez superado el estado de pupa y convertida en un precioso macho. Los élitros están bien desarrollados, cubriendo casi todo el abdomen. 27/5/2012, Ejemplar localizado en Valencia de Alcántara, Cáceres. Fotografía: Raphaël De Cock.
Durante el segundo atardecer planteamos resolver la pregunta de qué tipo concreto de hábitat prefiere la pequeña luciérnaga Lamprohiza paulinoi. Tras situar estaciones de muestreo en un recorrido de unas centenas de metros por encima del río, abarcando desde espacios abiertos de dehesa hasta la ribera, y esperar a que cayera la noche, del recuento de los machos derivamos que la especie prácticamente ocupa casi todos los tipos de bitopo, con una presencia muy destacada en los campos abiertos y huertas, estando presente incluso en las aldeas próximas a Valencia de Alcántara.
(Para poder determinar la especie de Lampyris cuidamos y alimentamos a algunas de las larvas del río Server durante unas semanas. El día 8 de junio uno de ellas pupó y se convirtió el 18 de junio en un macho de Lampyris iberica, lo que nos permitió añadir una nueva especie a esta magnífica localidad de luciérnagas)
Foto: Pupa de luciérnaga ibércia Lampyris iberica procedente de una larva del entorno del río Server. 9/6/2012, Ejemplar localizado en Valencia de Alcántara, Cáceres. Fotografía: José Ramón Guzmán Álvarez.
Foto: Luciérnaga Lampyris iberica macho procedente de una larva del entorno del río Sever. Se aprecia el tono negro no muy oscuro de los élitros, los cuales están delimitados por un fino margen de tono más claro, además de unas punteaduras rojizas bajo el escudo de la cabeza (pronoto). 18/6/2012, Ejemplar localizado en Valencia de Alcántara, Cáceres. Fotografía: José Ramón Guzmán Álvarez